Amor es dar cobijo…

 

En la sociedad actual la corriente de pensamiento dominante parece girar alrededor de todo un sistema de valores e ideales que configuran el tipo de persona que se supone que deberíamos ser para alcanzar la felicidad, la justicia y la armonía con los demás, y poder de esta manera ocupar el lugar que nos corresponde en la vida.

Así, a nivel colectivo se nos dice que todos deberíamos abrazar de manera entusiasta y sin reservas conceptos tales como la solidaridad, el ecologismo, la empatía, la multiculturalidad, la lucha contra el cambio climático o la defensa a ultranza de la diversidad y las minorías.

Al mismo tiempo, en el plano individual se nos habla de cosas como el derecho absoluto a poner límites y a construir espacios seguros, de evitar las relaciones tóxicas, de alcanzar el empoderamiento, de desarrollar la asertividad, y de reconectar con uno mismo.

Y, sin embargo, vivimos en un mundo en el que, bajo todo este aparente buenismo existencial, en la realidad cada día crece más el pensamiento único, el sentimiento de aparente superioridad moral de los que se creen con derecho a juzgar y condenar al discrepante, el sectarismo, la intolerancia, el egoísmo individualista, y la marginación y el abandono de los que piensan diferente.

Quizá deberíamos empezar a plantearnos si estos aparentes valores e ideales que hoy parecen imperar no son en realidad los responsables de que el mundo actual nos resulte tan asfixiante e inhumano, y si no son lo que nos lleva a sentimos cada vez más vacíos, más infelices, y más solos.

Igual ha llegado el momento de recordar que cosas como la tolerancia, el respeto, la generosidad, la abnegación y el amor por los demás fueron las que hicieron tan especial nuestro mundo, y que el camino para alcanzar la felicidad pasa por volver a ponerlas en el centro de la vida.

Al final todo se reduce en amar a los demás para poder amarnos a nosotros mismos, y en última instancia el amor es cuidar, proteger, dar cobijo…

Detalles técnicos de la fotografía: cámara SONY DSC-RX100M2, 18 mm, f/3.2, 1/60 s, ISO1600. Imagen tomada el 12/diciembre/2025 en Teror (Gran Canaria).